Un secreto: El Gran Hotel Baglioni de Florencia
Me gusta de vez en cuando escribir sobre lugares que no son del todo conocidos y que son perlitas que vale la pena recomendar, como esta iglesia en Roma, esta otra en Milán o este restaurante de Praga.
El Hotel Baglioni está lógicamente en las guías pero como lugar de hospedaje porque de hecho es un hotel, pero quiso mi curiosidad que buscando vistas de las cúpulas de Florencia encontré una foto que más allá de lo linda de la foto quise saber desde qué lugar estaba sacada. Con una búsqueda en google terminé encontrando una foto igual que promocionaba un hotel, el Baglioni. La foto estaba sacada desde su terraza.
El Baglioni tiene una historia bastante nutrida. La construcción de la estructura del Palacio data de mediados del S. XIX , Pertenecía al Príncipe Carrega de Lucedio y su primer nombre fue Palacio Carrega. Luego el Príncipe le pidió a los Baglioni que acondicionaran el Palacio para convertirlo en hotel, así es como en 1903 se inaugura con solo 64 habitaciones y 18 baños formalmente como Gran Hotel Baglioni Palace.
Con el transcurrir del siglo se anexaron varias propiedades aledañas y se le agregaron los detalles de lujo y confort que exigían los viajeros.
Como a toda edificación grande en Europa el siglo 20 no le fue fácil. Durante la Primer Guerra mundial tuvo que cerrar sus puertas, así también como en la gran inundación del 66´ pero lo más notable es que durante la Segunda Guerra las tropas aliadas vieron en la terraza del Baglioni el lugar perfecto para terminar con los francotiradores que resistían la liberación de Italia.
Por lo visto no fui la única que vio el potencial de esta terraza, que es sin lugar a dudas la terraza más estratégica de toda Florencia para disparar balas y también fotos.
El Gran Hotel Baglioni esta a la vuelta de la Santa María Novella así que no es difícil encontrarlo: Piazza Unità Italiana 6, Firenze. En cualquier momento del día pueden simplemente entrar, tomar el ascensor hasta la terraza y tomar algo mientras disfrutan de una de las mejores vistas de las cúpulas de Florencia.
Los precios pueden ser apenas 15% más caro que en un bar de cualquier lugar común pero la vista que tiene es infinitamente superior, en serio que uno se siente en la cima del mundo con estas vistas.
También pueden darse una vueltita por los lugares comunes del hotel, restaurantes y lobby que están muy hermosamente decorados, y si les da la billetera y se quieren alojar allí consulten, la última vez que chequeé estaba algo de 180 Euros la noche, o sea, caro pero no imposible.
Independientemente de eso, incluso si no tienen ni para una cerveza, no se priven de ir a la terraza, sacar un par de fotos y disfrutar de un ratito de las hermosas vistas.
El tip, el atardecer es un sueño y el anochecer es mágico.