Podemos ir a un Hotel Palacio y “los 10 mejores”
Hace unos días, y como yo es habitual, me llegó un mail de mi aconsejador de viajes favorito que me proponía ver “Los 10 mejores hoteles palacio del mundo”.
Aclaro que los Hoteles Palacio son eso, eran antiguamente Palacios, ahora son hoteles de lujo.
En el momento no lo leí, supongo que porque no pienso en alojarme en un hotel palacio simplemente porque está por encima de mi presupuesto, no porque no quiera o porque no me guste, claro está.
Ayer lo abrí porque ante todo soy curiosa y porque, como saben, me gusta conocer incluso acerca de las cosas que no creo que pueda ver en persona, y diría que sobre todo acerca de esas cosas, y por otro lado la experiencia me dice que en mis viajes todo empieza con una foto.
Vi la lista y en contra de mis suposiciones el tercer “hotel palacio” si lo conozco en persona.
Es el Palacio Çırağan (se pronuncia más bien Churagán) en Estambul.
No es que me haya olvidado de que estuve allí sino que no lo asocié con el enunciado.
Resulta que cuando estaba preparando mi viaje a Turquía me habían comentado que la mejor vista del Bósforo la tenía ese hotel y que no me perdiera de ir a tomar algo al atardecer en las terraza que tiene una fuente hermosa sobre una piscina infinita rodeada de jardines hermosos.
Nos reservamos una tarde y fuimos sin ningún problema, entramos con nuestra mejor cara de turistas, pasamos un control de seguridad como panchos por nuestra casa y fuimos directo a sentarnos en una mesa en las terrazas del hotel.
Resultó que era tal cual, la fuente, la piscina, los jardines y la vista del Bósforo.
El hotel es impresionante por donde se lo mire, de hecho era el palacio del último sultán de Turquía y fue construído a mediados del siglo XIX con todos los lujos que un Sultán pedía para sí mismo, así que no hay mucho más que decir.
El cuento termina en que pasamos una tarde maravillosa, tomamos unos tragos que hay que decir que no fue mucho más caro tomarlo ahí que en otro lugar, digamos un 10% más caro pero la vista, el servicio y el lugar valían la pena mil veces más.
Para el final de la tarde la estábamos pasando tan bien que, mitad en broma y mitad en serio, no me quería ir. (Más vale mitad en serio.)
Más allá de la anécdota lo que quería transmitirles es que quizás no podamos pagar los mil y pico de euros que sale una habitación pero eso no nos impide visitar hoteles palaciegos y pasar una tarde maravillosa en un ambiente super ameno y rodeado de un paisaje inigualable.
Es algo que suelo hacer bastante seguido, si en la ciudad a la que voy hay un hotel que por algún motivo quiero conocer, simplemente me hago el tiempo para ir a tomar algo y pasar un buen rato, esto lo recomiendo siempre como un buen programa.
En este tipo de hoteles, salvo raras excepciones, también se puede desayunar, almorzar o cenar, o simplemente tomar un café, y aunque son un poquito más caros el ambiente y el servicio son 5 estrellas y te sentís atendido como un rey.
Otro dato no menor es que son super seguros y tienen un estándar de limpieza por encima de cualquier restaurante.
Así que nada nos impide ir a un Palacio y pasarla como reyes aunque sea un rato.
Les juro que van a pasar un momento inolvidable.
Acá la lista de “Los 10 más”